El museo envía a la restauradora de arte Ellen Cross para que examine el cuadro. Ellen nunca hubiera imaginado que su misión la llevaría por toda Europa, siguiendo el rastro del retrato del famoso príncipe de Valaquia, Vlad Tepes.
La joven restauradora padece una grave enfermedad. La búsqueda del cuadro la lleva desde Budapest hasta Estambul, y la involucra en un conflicto entre el primer vampiro y la "La Sombra del Dragón": una orden secreta que anhela crear un nuevo linaje de criaturas libres del yugo de Drácula.