Memory es un juego de cartas que requiere concentración y memoria. Al empezar el juego se mezclan las cartas y se colocan boca abajo sobre la mesa. Los jugadores, uno a la vez, revelan dos cartas; si éstas son iguales van al jugador que tiene el turno, él cual puede revelar otras dos. De lo contrario, se vuelven a mezclar y poner en su posición original en la mesa, y el turno pasa al siguiente jugador. El ganador es el jugador que logra descubrir más parejas.